"Aun en la noche más oscura, la luna sigue brillando."
Hay momentos en la vida en los que todo parece cubrirse de sombra. Caminamos a tientas, con el alma cansada, buscando aunque sea un rayo de luz que nos recuerde que no todo está perdido.
Y ahí está ella… la luna. Silenciosa, constante, humilde en su resplandor, recordándonos que incluso en medio de la oscuridad, algo sigue brillando.
Porque la oscuridad no es ausencia de esperanza, sino un espacio donde otras luces —más suaves, más sutiles— se animan a mostrarse. Y en esa noche profunda, donde el miedo susurra y la incertidumbre pesa, la luna nos abraza con su luz calma y nos dice: “Esto también pasará.”
Brillar no siempre es deslumbrar. A veces, es simplemente mantenerse encendido, aunque sea apenas, aunque nadie lo note. Como la luna. Como vos, cuando decidís seguir, incluso cuando todo parece oscuro.
Nunca dejes de brillar
Laura Cornejo
@Cornejas.ar
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